La faena política.
Por : Gilberto LAVENANT
Ayer miércoles, Fernando Castro Trenti, candidato a Gobernador del Estado, por la Alianza Compromiso por Baja California, durante aproximádamente una hora, poco más, poco menos, hizo un esbozo de su proyecto de gobierno. Esto, en uno de los salones de las torres, de la familia Bustamante, en Tijuana.
En el recinto, había, no solamente políticos, sino también representantes o miembros de las organizaciones empresariales y sociales en general. Era evidente que muchos querían ver y escuchar al priísta, verdaderamente preocupados por saber quien habrá de gobernar a Baja California el próximo sexenio. Se puede decir que unos y otros lograron satisfacer sus objetivos.
Castro Trenti, logró mantener atentos a los asistentes, quienes en varias ocasiones interrunpieron con aplausos su disertación. En especial, cuando habló de generar oportunidades de empleo para personas mayores de 35 años y más, reducir hasta en un 50% los sueldos de los funcionarios estatales y obligarlos a que paguen los servicios de teléfonos celulares
Así mismo, establecer guarderías para apoyar a las madres trabajadoras, el cubrir el costo de mantenimiento de los planteles educativos, el fortalecer la infraestructura para impulsar las actividades económicas básicas del Estado, sobre todo, sin necesidad de aportación de los bajacalifornianos, sino recurriendo a fondos federales e internacionales.
El establecer un sistema de simplificación administrativa, a partir de la apertura inmediata de las nuevas empresas, con un plazo de 6 meses para regularizarse. Seguramente los medios informativos darán cuenta de todas y cada una de las propuestas del priísta.
Lo cierto es que, quienes asistieron, ya tienen una idea bastante clara de lo que es Fernando Castro Trenti, y cuáles son sus propuestas generales para el caso de que logre el triunfo electoral el 7 de julio. Ya nadie podrá contarles. Ni más, ni menos.
Fernando dijo, entre otras cosas, que Baja California es un Estado con un gran potencial para su desarrollo. Que no obstante los avances, se aprecian lacerantes rezagos, que es urgente superar. Que “Somos parte de una nueva historia, que nos convoca a la construcción de la sociedad que queremos”.
Pueden decirlo, sin temor a equivocación, que el priísta conoce Baja California y sus necesidades. Castro Trenti parecía un motivador. Inicialmente, sobre el estrado, disertó pausadamente, centrado, sin titubeos, citando cifras y porcentajes relativos a la problemática social.
Luego descendió del estrado y avanzó entre los asistentes. Posteriormente se apoyó en diapositivas proyectadas en pantallas gigantes, para describir su plan de gobierno, denominado “Mi compromiso por Baja California”, basado en 3 ejes rectores : La familia es primero, Para que tengas más y El gobierno eres tú. Un micrófono inhalámbrico, le permitió desplazarse, sin dificultad alguna.
Un programa, tres ejes rectores, 13 ejes temáticos, 55 sub-ejes, 286 acciones y 70 proyectos estratégicos. Lo explicó a grandes razgos.
Sin caer en la tentación de las descalificaciones, señaló puntualmente la problemática socioeconómica de Baja California. Mencionó los porcentajes y lugares que ocupa esta entidad, en índices nacionales, en áreas como salud, educación, empleo. Todos negativos.
Como era de esperarse, estuvieron presentes los candidatos de la Alianza Compromiso por Baja California, a los diversoas cargos de elección popular.
En aras del equilibrio político, y para que luego los seguidores y fánaticos de Francisco Vega de la Madrid, candidato a Gobernador por la Alianza Unidos por Baja California, y en tanto que solamente hubo un actor, en ese evento político, falta ver si el panista, es capaz de hacer una disertación de este tipo, sin titubeos, sin vacilaciones.
La cuestión es que si algunos afirman que las comparaciones son odiosas, en algunos casos, como en el político electoral, son esenciales, imprecindibles. Por ello era sumamente importante, que Vega de la Madrid hubiese participado en el debate de candidatos a la gubernatura, organizada por una empresa periodística.
Mientras no se de la confrontación, frente a frente, que permita conocer y medir las capacidades discursivas de los candidatos, cualquier observación sobre estos, será dispareja y puede ser considerada desiquilibrada. Pero esto es por culpa de los propios panistas, que rechazaron enfrentar y aprovechar esa oportunidad.
Imaginen a un torero, que cuando le dan la alternativa, cuando tiene la oportunidad de demostrar que merece le llamen matador, y no simple novillero, apenas ve al toro y sale del ruedo, corriendo, para ir a esconderse tras los burladeros. Lidiar a un toro, no es cosa fácil, aunque parezca. Sobre todo, se requiere de mucho temple, de valor, de coraje. Igual o más, se necesita para ser gobernador.
Cabe observar que, en cada corrida, el matador puede salir en hombros, o en camilla rumbo al hospital. Algunos, por timoratos o simplemente por mala suerte, llegan a perder la vida. Más nadie deja de reconocer la hombría, por enfrentar al toro, en lugar de huir despavoridos. Cualquier similitud con la vida real, es mera coincidencia.
Ayer, Castro Trenti “se aventó al ruedo”, y se lució. El panista, Kiko Vega, aún está debiendo al respetable, demostrar si es capaz de hacer eso, o más. Si es capaz de demostrar que tiene el tamaño político suficiente para llegar a ser Gobernador de Baja California. El columnista se compromete a hacer la crónica correspondiente, si este deja de correr y se enfrenta al “toro”. Si los miedos no lo dejan, que abandone la contienda. Así de fácil.
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