NI LA PROSA NI LA RIMA

por Gustavo Adolfo Póker

  SE LLAMA Antonio, y para decepción de los amantes de los seudónimos, no le dicen “Toño”, sino gachupinijuesu….. Se apellida Solá y nació en España, aunque adquirió la nacionalidad mexicana en tiempo record, debido no en gran parte, sino en su totalidad, a que se dedica a asesorar a los candidatos del PAN en campañas electorales.
Desafortunadamente, su habilidad como asesor electoral radica en crear campañas negras, negrísimas, que tienen la virtud de crear encono entre los mexicanos, recurrir a las bajezas más inimaginables y desacreditar por todos los medios posibles a los adversarios políticos. En su curriculum se encuentra la campaña dirigida contra Andrés López Obrador, la del famoso “Peligro Para México”, que al final de cuentas logró el cometido de evitar que el PRD desbancara al PAN de la Presidencia de la República.

  No es casualidad ahora, que miles de bajacalifornianos hayamos sufrido una abrupta interrupción del sueño, entre 3 y 5 de la mañana, para atender un telefonazo con publicidad electoral a favor de Fernando Castro Trenti, y obviamente encauzada así para crearle molestia entre el electorado. Se les olvida que los electores bajacalifornianos no se chupan el dedo, y pecaría de ingenuo el que realmente piense que un candidato está convencido de que despertar a alguien a las 3 de la madrugada para que escuche su mensaje publicitario es la mejor manera de convertirlo en adepto. Visto desde la óptica de un estratega perverso, difundir publicidad con mensajes del enemigo, pero a una hora que moleste, es una forma de ayudar al candidato de casa.

 Tampoco es casualidad que la campaña electoral panista haya arrancado con aquel famoso –y ridículo- señalamiento de Ernesto Ruffo Appel sobre una denuncia verbal, única en su género, que como Gobernador levantó contra quien en ese tiempo era Delegado Federal y ahora es una seria amenaza para mandarlos a la banca 

  Menos casualidad es, por tanto, que las redes sociales estén inundadas con ataques de todo tipo contra el puntero de las encuestas electorales. Si la consigna es bajarlo a como dé lugar, hay qué pensar que la ética y el respeto a los demás poco papel tienen que jugar en las estrategias diseñadas por Antonio Solá.

  Qué pobre espectáculo de los panistas, en verdad, si su única esperanza para conservar el poder radica en las habilidades de un rociador de estiércol. Más triste el papel de su candidato, que al supeditarse a esta estrategia de campañas negras como opción para ganar, termina por aceptar lo limitado de sus capacidades. Y que forma de “Abrir los Ojos” de  la sociedad bajacaliforniana, tras una estéril espera de 24 años por un cambio que nunca llegó.

Nació gachupín, ahora es azteco

Sembrar odio es su especialidad

Para candidatos sin capacidad,

De cara bonita y cerebro seco