por
Gustavo Adolfo Póker
ALTURA DE miras no es solamente poner los ojos en el
firmamento y alcanzar lo que uno se ha propuesto. Es pelear denodadamente por
lo que se quiere; es poner alma, corazón y vida en la consecución de un
objetivo. Pero más importante aún, es tener la humildad de asimilar la
adversidad, cuando la empresa que se ha intentado no es coronada con el éxito.
Más aun, es tener la fortaleza para volver a intentarlo.
En un sistema democrático como el que nos hemos dado
los mexicanos, que se perfecciona con cada ejercicio electoral, pero que aún
alberga muchas áreas para mejorar; al que le son reconocidas las bondades con
cada triunfo por la parte ganadora, pero que es satanizado con cada revés por
quienes no alcanzan la victoria, resulta innegable establecer que la actitud
que asumen estos últimos es fundamental para garantizar la gobernabilidad, una
vez concluidos los comicios.
Surge la
presente reflexión, tras haber tenido la oportunidad de ver el mensaje que, a
través de las redes sociales, ha difundido Fernando Castro Trenti, el candidato
de la Coalición Compromiso por Baja California, que por razones que no habrán
de examinarse en este espacio, no pudo acceder a la gubernatura de Baja
California.
El
video-mensaje en mención ha sido muy bien recibido por la sociedad
bajacaliforniana, que aplaude la madurez de un servidor público de sólida
trayectoria y la actitud serena y madura de un político con la capacidad de
entender las circunstancias de su proyecto y de sus tiempos.
Lejos de
abandonar la contienda con el desánimo que se apodera de quienes no han
alcanzado su objetivo, la postura de Fernando Castro Trenti, de cara a su
reincorporación a la Cámara de Diputados, es la de reanudar sus esfuerzos por contribuir
a aportar soluciones a la compleja problemática bajacaliforniana. Actualizado
su conocimiento sobre los obstáculos que frenan el crecimiento del estado, tras
conocer de primerísima mano la naturaleza y alcance de las situaciones que es
necesario corregir o eliminar, hoy más que nunca, Fernando Castro Trentirepresenta
una esperanza de mejoría para miles de bajacalifornianos.
Su llamado a
la unidad, a darle la vuelta a la página y a mirar al frente superado el
proceso de renovación de poderes, es un ejemplo de madurez y de los nuevos
tiempos políticos que, contra todo lo que se ha señalado, muestran el nuevo
rostro del partido que encabeza la administración pública federal.
Un proyecto
político como el que se pondrá a prueba por primera vez en Baja California,
donde los extremos opuestos del espectro político se fusionaron en búsqueda del
poder, encierra muchas interrogantes en cuanto a su funcionalidad en los
hechos. Como oposición responsable, Fernando Castro Trenti ha dado un
importante paso al frente para garantizar que no se rompa el esquema de
gobernabilidad en nuestro estado.
No es fácil,
no lo han hecho en situaciones similares candidatos de otros partidos, que han
antepuesto intereses personales a los superiores intereses de la sociedad a la
que han aspirado a dirigir.
Altura de
miras, como mencionábamos al principio de esta reflexión, es contribuir siempre
al crecimiento y mejoría de la sociedad, independientemente del ámbito de
acción en el que a cada quien le corresponda desarrollar su esfuerzo. Llámese
Gobierno del Estado, llámese Congreso de la Unión. http://www.youtube.com/watch?v=98OB-QM2tR4
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