Por Indira
Mata
Ahora
resulta que en el Partido Acción Nacional (PAN) la lucha para postular a
mujeres a los cargos de elección popular revela que a costa de cualquier precio
pretenden utilizar como disfraz la
“igualdad de género” designando a las amigas, esposas, hermanas y demás,
vinculadas claro a quienes tradicionalmente han acaparado los cargos públicos y
de elección.
Como en
tiempos de Lucrecia Borgia (1480-1519), hija poderosa del Papa Alejandro VI, el
utilizar a las parientes y amigas se pudiera observar de lo más ordinario, pero
la realidad es que trastoca de manera negativa a los partidos políticos, que
necesitan hoy más que nunca recuperar la credibilidad perdida.
Baja
California inició su proceso electoral para renovar alcaldías y cabildos (5)
así como diputaciones locales (25); la última reforma electoral obliga a cada
partido contendiente a designar la mitad de las candidaturas a mujeres. Eh ahí
el gran dilema…
En palabras
coloquiales, la dirigencia estatal del PAN con José Luis Ovando al frente está
en medio de tremendo lío porque el rojo vivo está más candente que nunca entre
los y las aspirantes panistas. Antes era más fácil porque únicamente se
repartían entre hombres.
Los tiempos
han cambiado, pero las malas prácticas que se están evidenciando son señaladas
y criticadas por personajes como Ernesto Ruffo Appel, y los ejemplos abundan:
En
Tijuana, resulta que la esposa del hoy
diputado federal panista Teodoro “Lolo”
Barraza aspira –y en serio- a una candidatura; la hermana del también
legislador federal Jorge Ramos y la de nombre Silvia Álvarez, hermana del
diputado local Gerardo Alvarez busca apuntarse en la lista de prospectas.
En Ensenada
sobresalen los nombres Martha Vera
González, hermana de Francisco Vera González, Director Estatal de la Unidad de
Especialidades Médicas (UNEME) y María de los Angeles Zepeda Morán hija del
dirigente municipal panista Hugo Zepeda Berrelleza.
En Mexicali,
la tradición de la militancia no escapa
del influyentismo y amiguismo que daña tanto a todos los partidos políticos.
Aunque destacadas, los nombres de Alejandrina Corral, actual directora del
Registro Civil Estatal, es identificada como amiga del grupo de Rubén Armenta y
la diputada Mónica Bedoya; la exregidora Graciela López la impulsan amigos
cercanos del senador Víctor Hermosillo y
compañía, que incluye al suplente y
diputado local Gustavo Sánchez. También Mayola Gaona, una de las encargadas del
reparto de apoyos sociales desde la SEDESOE también busca candidatearse con el
apoyo de titulares de esa dependencia estatal.
Tal parece
que las “juanitas” ahora serán parientes y amigas, sin importar en realidad la
militancia y trayectoria de las mujeres de los partidos políticos, pero de
manera específica en el blanquiazul…
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