Claro caso de encubrimiento se ventila en esta prestigiada
tienda departamental
Mexico.- La
Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal (PGJDF) confirmó la
muerte de una empleada de la tienda departamental Liverpool, ocurrida la noche
del 15 de noviembre en el interior de la sucursal ubicada en el centro
comercial Perisur.
“El día de hoy (miércoles 17 de diciembre), el Instituto de
Ciencias Forenses del Tribunal Superior de Justicia del Distrito Federal, en
ampliación al protocolo de necropsia de fecha 17 de noviembre pasado y con base
en las fotografías y el estudio histopatológico realizado al cuerpo de la
víctima, concluyó que la congestión visceral generalizada que presentó se debió
a una asfixia por estrangulamiento”, indicó la dependencia en un comunicado.
Angélica Trinidad Romero Severiano, de 24 años, falleció la
noche del 15 de noviembre, cuando se realizó el Buen Fin, en el baño para
empleados de la tienda departamental ubicada en el centro comercial Perisur;
sin embargo, su cuerpo fue encontrado la mañana del 16 de noviembre por
personal de Liverpool, de acuerdo con una entrevista con Omar Robles, primo de
la víctima, difundida por La Izquierda Diario.
Robles señaló en la entrevista que, tras encontrar el
cadáver, personal de la tienda contrató a un médico particular, quien
estableció que la muerte se debió a un paro cardiaco y después contrató los
servicios de una agencia funeraria sin dar aviso de la muerte a las
autoridades.
Fue hasta después de que el médico emitió el acta de
defunción que los empleados de la tienda se comunicaron con la familia para
avisarles que Angélica había muerto un día antes debido a un infarto.
Durante la llamada, explicó Omar Robles, el personal de Liverpool
les dijo a los familiares que no tenían de qué preocuparse, puesto que la
tienda cubriría los gastos de la funeraria, incluidos los gastos por la
cremación.
Tras enterarse de la muerte de Angélica, los familiares
acudieron a la tienda; sin embargo, no les permitieron ver el cadáver “porque
el médico la estaba preparando”, señaló el primo de la víctima, quien agregó
que después acudieron a funerales Gris, en la delegación Benito Juárez, a donde
había llevado el cuerpo, para evitar que sus restos fueran cremados y se
encontraron con que el cadáver ya estaba embalsamado.
“El que sacó el cadáver de la tienda fue la funeraria, nunca
se le dio parte a las autoridades de que había fallecido ahí, entonces la
trasladan a la funeraria y a nosotros nos dicen ‘saben qué, ella ya está en la
funeraria, ya no está aquí en la tienda, ya no pueden pasar, y si van a la
funeraria, ahí ya la ven’. Cuando nosotros llegamos, en menos de una hora, hora
y media, ella ya estaba preparada, ya estaba embalsamada y tenían órdenes los
de la funeraria de cremar el cuerpo”, explicó Omar Robles.
Cuando vieron el cuerpo, uno de los familiares se percató
que Angélica tenía un golpe en la cabeza, por lo que solicitaron que personal
de la funeraria le quitara el maquillaje y descubrieron que tenía una herida en
la cabeza y otros signos de violencia.
“En ese momento, al estar discutiendo entre nosotros, uno
del personal de la funeraria se acerca y nos dice: ‘la encontramos en muy mal
estado cuando la recogimos en Liverpool’. Cuando nosotros vemos eso, pasó de
una suposición a algo cierto eso de que algo más le había pasado”.
Luego de ver las marcas, los familiares de Angélica pidieron
la intervención del Ministerio Público de Tlalpan, quien determinó que los
restos de Angélica fueran llevados al Servicio Médico Forense del Distrito
Federal, donde se estableció que el cadáver presentaba heridas defensivas en el
pecho y abdomen, además de que se rechazó la versión del infarto.
“Ahí nos dieron otro diagnóstico totalmente distinto, el
cual fue congestión visceral generalizada, que es provocada por aplastamiento
de tórax, golpes o asfixia. Aparte, la médica forense nos comentó que la
muchacha presentaba golpes defensivos”, aseguró el primo de la víctima.
A pesar de las irregularidades en el caso, agregó, Liverpool
se ha negado a entregar los videos de vigilancia del sábado 15 de noviembre.
“Nosotros no buscamos dinero, lo que deseamos es que se
capture al culpable. ¿Cómo es posible que Liverpool permita que un asesino esté
suelto, impune, que esto pase en sus tiendas? ¿A quién protege Liverpool?”,
concluyó Omar Robles.
Angélica Trinidad Romero Severiano era madre soltera de una
niña de dos años y desde hace siete meses trabajaba en Liverpool.
Hasta el momento, Liverpool no ha realizado algún
pronunciamiento sobre el caso.
No hay comentarios:
Publicar un comentario