El papa
también pidió por Oriente Medio en su mensaje de Pascua que fue solo en
italiano "para no hacer diferencias" y no en cincuenta idiomas como
Juan Pablo II y Benedicto XVI lo había hecho. En la plaza de San Pedro se
congregaron más de 250 mil fieles.
EL PAPA
FRANCISCO AGRADECIÓ A LOS CERCA DE 250 MIL FIELES QUE SE CONGREGARON EN LA
PLAZA DE SAN PEDRO.
Ciudad del
Vaticano • El papa Francisco pidió el
domingo, en su primera Pascua de Resurrección como obispo de Roma, que reine la
paz en el Medio Oriente y la península coreana, tras oficiar misa ante más de
250 mil asistentes.
Tras la misa
en la Plaza de San Pedro, Francisco compartió la alegría del público con motivo
de la resurrección de Cristo tras su crucifixión. En el papamóvil, Francisco
recorrió brevemente una sección de los asistentes, besando a bebés y
acariciando niños en la cabeza.
Un
admirador del papa y del equipo de futbol del que es seguidor el Romano
Pontífice en Argentina, San Lorenzo de Almagro, insistió en que Francisco
recogiera la camiseta del equipo que agitaba. Francisco la recogió amablemente
y la retuvo por breves instantes.
Desde el
comienzo de su papado el 13 de marzo, Francisco ha repetido en múltiples
ocasiones su preocupación por los pobres y el sufrimiento de la gente como tema
central de sus mensajes, y el discurso que pronunció la Pascua de Resurrección desde
el balcón de su estudio que domina la Plaza de San Pedro fue un reflejo de sus
deseos de paz y justicia social.
El obispo
de Roma deseó que la expresión "felices Pascuas" pueda llegar a
"cada casa y cada familia, especialmente donde el sufrimiento es mayor, en
los hospitales, en las cárceles". Francisco rezó para que Cristo ayude a
la gente a "cambiar el odio por el amor, la venganza por el perdón".
Al igual
que sus predecesores, pidió a israelíes y palestinos que reanuden las
negociaciones de paz y pongan fin al conflicto que "ha durado
demasiado". Y, sobre los dos años de guerra civil en Siria, Francisco
preguntó: "¿cuánto más sufrimiento debe haber antes de una solución
política?".
El Papa
mostró asimismo su deseo de que reine el "espíritu de la reconciliación"
en la península coreana, donde Corea del Norte afirmó haber entrado en "un
estado de guerra" con el Sur. Lamentó además la guerrilla y el terrorismo
en Africa, y lo que consideró la forma de esclavitud más extendida: el tráfico
de seres humanos.
Francisco,
el primer papa de Latinoamérica y jesuita, lamentó que el mundo siga
"dividido por la avaricia y la búsqueda del acomodo fácil". Pidió el
fin de la violencia ligada al narcotráfico y la explotación desaprensiva de los
recursos naturales.
Antes,
Francisco ofició misa en la explanada frente a la basílica, en un altar
protegido por un toldo blanco.
Idioma del
mensaje papal
El papa
Francisco pronunció hoy el tradicional mensaje Pascual y la bendición Urbi et
Orbi solo en italiano y no felicitó la Pascua en el medio centenar de idiomas,
como hasta ahora hicieron el beato Juan Pablo II y Benedicto XVI.
"Queridos
hermanos y hermanas, a todos los que me escuchan en Roma y en todo el mundo,
les dirijo la invitación del Salmo: «Dad gracias al Señor porque es bueno,
porque es eterna su misericordia", dijo el papa Bergoglio en italiano al
final del Mensaje Pascual.
Después
agregó: "Queridos hermanos y hermanas venidos de toda las partes del mundo
a esta plaza, corazón de la cristiandad, y a todos los que seguís (el rito) a
través de los medios de comunicación. Renuevo mi felicitación: Felices
Pascuas".
"Portar
a vuestras familias y a vuestros países el mensaje de alegría, de esperanza y
de paz que cada año, en este día, se renueva con fuerza. El Señor resucitado,
vencedor del pecado y de la muerte, sea apoyo para todos, especialmente los más
débiles y necesitados".
Francisco
volvió a dar las gracias a los 250 mil fieles que colmaron la plaza de San
Pedro y alrededores y los que siguieron la misa a través de la radio, la
televisión o internet "y por vuestro testimonio de fe".
También
agradeció a las empresas de flores de Holanda por haber regalado las 40 mil
plantas y flores que adornaron la plaza de San Pedro.
"A
todos repito con afecto: ¡Que Cristo Resucitado guíe a todos y a toda la
humanidad por el camino de la justicia, amor y paz!", concluyó.
Hasta
ahora, al final del Mensaje Pascual, sus antecesores Juan Pablo II y Benedicto
XVI felicitaban en 65 idiomas, entre ellos español, portugués y guaraní, con
frases cortas, pero en la lengua materna de los miles de fieles presentes, que
lo acogían con vivas, aplausos, cánticos y ondear de banderas.
Hoy, el
papa Bergoglio, por el contrario, pronunció una felicitación más larga, aunque
en una sola lengua.
Respecto a
si Bergoglio sólo hablará en italiano, el portavoz vaticano, Federico Lombardi,
dijo recientemente que estamos al principio del pontificado y ya se verá la
evolución.
Durante la
audiencia del pasado miércoles, el papa sólo habló en italiano.
Hasta
ahora, tras la catequesis, Benedicto XVI pronunciaba un resumen de la misma en
diferentes idiomas (español, francés, inglés, alemán, polaco y de los países
del este europeo) y saludaba a los fieles de esas naciones en su idiomas,
incluso en árabe.
En la
audiencia del miércoles, el resumen en esos idiomas los pronunció un monseñor
del Vaticano, así como el saludo del papa.
Francisco
habló todo en italiano, incluso cuando se dirigió a los fieles españoles,
argentinos y de otros países latinoamericanos presentes, lo que desilusionó a
muchos de los presentes, que querían escuchar en español al primer papa
Latinoamericano.
Lombardi
justificó el que no hablara en español, "para no hacer diferencias"
respecto a los otros fieles, "y comportarse con todos igual".