por
Gustavo Adolfo Póker
ESO SI tenemos que reconocer: para
juegos imaginarios y ejercicios fantasiosos elaborados a partir de
suposiciones, se pintan solos los amigos panistas. El problema es que son dos
problemas: este juego de imaginación solo aplica cuando lo juegan ellos, y
recurren tanto a estos artilugios de ficción, que acaban por confundirlos con
la realidad.
Y el jueguito se juega a todos los niveles: José Guadalupe Osuna Millán
admite en su subconciente que van a perder la gubernatura, cuando declara a
reporteros de Milenio que “se imagina” un broncononón en seguridad en el
estado, con el regreso del PRI al poder. Antes que él, Gustavo Madero y Jesús Zambrano
también se aventaron un jueguito: “supusieron” que si a Castro Trenti le dicen
El Diablo, es presagio de lo peor para Baja California, y así lo difundieron
alegremente a través de un muy publicitado video.
¿Acusaciones concretas? Ninguna. Unicamente
“me imaginos” y “supongos que”.
Hoy nos enteramos que el infumable
Modesto Ortega desperdicia el valioso tiempo de los comunicadores, al convocar
a reunión para informar que maestros de preparatoria andan pidiendo a sus
alumnos que les muestren su credencial de elector, y que brigadistas del PRI
andan recorriendo los panteones, por lo que él “se imagina” un complot rojo
para encauzar votos de preparatorianos y de difuntos en favor de los priistas.
¡Oh imaginación! Cuántos abusos se cometen en tu nombre.
No me llama la atención jugar este
juego de los azules. Si lo jugara, yo “imaginaría” que la campaña “abre tus
ojos” se armó con toda la intención de desacreditar a los candidatos rojos e
impulsar al candidato azul. “Imaginaría” que hay un descarado vínculo entre los
slogans de “las obras se hacen con el dinero de la gente” y “conmigo la gente
manda”. Siguiendo con el juego, “imaginaría” también que se gastaron muchos
millones de pesos en este gigantesco esfuerzo publicitario, que rebasaron el
tope presupuestal autorizado en la partida de publicidad institucional y
disfrazaron los gastos con otros conceptos, e “imaginaría” también que la
prueba más fehaciente de una acción colectiva encubierta, es que nos hayan
salido con que, oficialmente, la campaña “abre tus ojos” no existe.
Mi “imaginación” es tan febril, que
“supongo” que el error administrativo de 16.4 millones de pesos que le redituó
430 mil pesos a cada uno de los 38 senadores panistas, no es tal, sino un
descarado intento de soborno de quien controla los millones de pesos a los que
tiene derecho la fracción. “Imagino” también que estos errores se dan con más
frecuencia de la que imaginamos, y si nos venimos enterando ahorita, fue
gracias a que los senadores del PAN se la viven jalándose las greñas y trenzados
todos contra todos en salvaje batalla campal, sin importarles exhibir su
podredumbre moral y su real dimensión política, desesperados como andan por
rescatar lo poco que les queda, ahora que el partido amenaza con terminar de
derrumbarse.
“Imagino” que mucho debe saber el Senador panista Javier Corral, sobre
el desempeño que tuvo como gobernador de Baja California el ahora Senador
Ernesto Ruffo, panista como él, ya que se aventó la ocurrencia de acusarlo ante
los medios de comunicación, de haber tenido fuertes ligas con el narco y el
crimen organizado en sus días de gober.
Por más que lo niegue, “imagino” que
Francisco Arturo Vega efectivamente tiene su lugar de residencia en San Diego,
California, y que finalmente sucumbió a las tentaciones del poder y terminó por
vender y comprar algunos lotecillos en Tijuana, a escasos días de entregar la
Presidencia Municipal.
“Imagino” que mienten cuando aseguran que Antonio Solá no está detrás de
las campañas negras que han llevado a un nuevo nivel de bajeza la presente
campaña electoral.
Finalmente, “imagino” que las encuestas que dice Francisco Arturo Vega
que lo ubican como ganador, y que por alguna misteriosa razón se resiste a
exhibir, son un producto más de su imaginación…
Este proceso tan manchado
Echó a volarmi imaginación
Me “imaginé” ya la elección
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