TIJUANA, B.C. A 14 DE SEPTIEMBRE DEL 2014.- La
Procuraduría General de Justicia del Estado a través de la Dirección de
Control de Procesos zona Tijuana, fue notificada por el Juzgado Primero
de lo Penal, de la sentencia definitiva de 183 años y 9 meses de
prisión dictada a dos hombres por los delitos de secuestro agravado (en
número de 8) y delincuencia organizada.
El
Juzgado Primero de lo Penal determinó luego de analizadas todas y cada
una de las constancias sentenciar con la pena señalada a Ramón Gámez Osuna (a) El Monrras o (a) El Munrras de 39 años de edad originario del Estado de Nayarit y Carlos Alberto Espinoza Vega a) El Charly o (a) El Zurdo, de 41 años de edad, originario
de Tijuana. Ambos eran integrantes de una célula delictiva del Cartel
Arellano Félix dedicada al secuestro durante el 2008.
Estos
sujetos fueron asegurados el 17 de enero del 2008, después de un
enfrentamiento entre agentes de las distintas corporaciones, Secretaría
de la Defensa Nacional, y Policía Federal, contra delincuentes, en un
domicilio del fraccionamiento Cortés.
Los
hechos que se les imputan a los hoy sentenciados se registraron cuando
agentes de la Policía Federal Preventiva (PFP), dentro de los trabajos
de inteligencia y de campo, ubicaron una casa de seguridad de
delincuentes con un cúpula marcada con el número 13843 ubicada sobre la
calle Agua Prieta, del fraccionamiento Cortés.
Al
arribar a la vivienda los agentes federales fueron recibidos a balazos
por delincuentes, por lo que se desató un enfrentamiento y una fuerte
movilización policial de agentes de la Policía Estatal Preventiva (PEP),
agentes municipales, elementos federales, Policía Ministerial, y
efectivos del Ejército Mexicano, que llegaron al apoyo.
Tras el sometimiento de los agresores, elementos de diversas corporaciones, ingresaron a la casa en donde fueron capturados Espinoza Vega y Gámez Osuna.
Además
se decomisó al grupo armado que pertenece a una célula del Cártel
Arellano Félix, 3 camionetas de reciente modelo, 3 chalecos balísticos, 8
armas AK-47 de las conocidas como “Cuerno de Chivo”, 3 fusiles R-15,
así como 30 cargadores.
Por
estos hechos y debiéndose tomar en consideración lo dispuesto en el
artículo 26 del código penal vigente en el Estado, en su primer párrafo
en el sentido de que la prisión consiste en la privación de la libertad,
purgarán ambos sentenciados, la pena máxima en Baja California,
consistente en 50 años de prisión, por lo que la penalidad dictada por
el juez debe ajustarse a esos lineamientos.
Con
estas acciones, la PGJE reitera su compromiso con la ciudadanía
bajacaliforniana para el fortalecimiento del sistema de procuración de
Justicia que derive en la obtención de sentencias ejemplares como esta
para delitos graves como el secuestro.
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