México, D. F. - Una búsqueda de dos décadas contra uno de los mandos históricos de los Arellano Félix terminó el pasado sábado con la captura de Manuel Aguirre Galindo "El Caballo”, quien fuera considerado como el principal lavador de dinero de la organización.
La Policía Federal aprehendió en la Ciudad de México al presunto narcotraficante también apodado "El Galán”, "M-21”, "M-20” y "M-17”, al día siguiente de que un payaso ejecutara en Los Cabos, Baja California Sur, a Francisco Rafael Arellano Félix, el mayor del clan sinaloense.
Nacido en 1943 en Mexicali, Baja California, Aguirre también se hacía llamar Estanislao Olmos González y tenía pendiente desde el 2003 una orden de detención provisional con fines de extradición a Estados Unidos, donde se ofrecía una recompensa por su captura de 2 millones de dólares.
En la última década jueces federales mexicanos libraron varias órdenes de aprehensión contra "El Caballo”, quien tuvo un paso fugaz por la extinta Policía Judicial Federal, por operaciones con recursos de procedencia ilícita, delitos contra la salud y delincuencia organizada.
Aguirre tiene el antecedente de haber sido detenido en 1981 en la localidad de "El Bajón”, cerca de San Felipe, Baja California, junto con 8 sujetos que descargaban droga en una pista clandestina.
Oasis
En 1998 la PGR aseguró el complejo Turístico Oasis Resort Playa Mar, en Playas de Rosarito, Baja California, porque había indicios de que había sido adquirido por "El Caballo”, a través de familiares, con dinero del narcotráfico.
Su madre Esperanza Galindo tenía registradas a su nombre un millón 384 mil 199 acciones del negocio, valuadas 13 millones 841 mil 990 dólares, y Guadalupe Aguirre Galindo, la hermana, 165 mil 734 acciones con un precio de un millón 657 mil 340 dólares.
Eugenio Elorduy, el gobernador panista de Baja California en la década anterior, vendió en 1985 al narcotraficante el terreno donde se ubica el hotel y complejo turístico Oasis, también mencionados en la lista de empresas y personas designadas del Departamento del Tesoro estadounidense.
Antes del aseguramiento del inmueble, el 8 de noviembre de 1997 la PGR irrumpió en una fiesta del Oasis Resort durante la celebración de la boda de uno de los hijos de Jesús Labra Avilés, capo y tío político de los Arellano, con una hija del narcotraficante José Conteras Subías.
La Policía Judicial Federal buscaba aquella noche a "El Caballo”, pero se escabulló entre la gente. Una semana más tarde fueron ejecutados en Tijuana Miguel Ángel Anaya Valenzuela y Juan Antonio Martínez Catarino, agentes federales que participaron en el operativo.
Desde aquella ocasión "El Caballo” se esfumó de las autoridades federales y nunca más volvieron a estar cerca de su paradero, no obstante que algunas versiones señalaron que estaba retirado en Monterrey, que se había hecho cirugía plástica y que tenía acuerdos con agencias estadounidenses y autoridades mexicanas que impedían su captura.
El sábado, horas después del crimen de Francisco Rafael Arellano en Los Cabos, Aguirre Galindo fue detenido y puesto a disposición de la Seido.
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