· Una comerciante recibió una llamada donde le indicaban que tenían secuestrada a su empleada y que depositara 50 mil pesos
Mexicali, Baja California, a 4 de Mayo de 2013.- Como parte de la estrategia para combatir los delitos de extorsión telefónica en el Valle de Mexicali, agentes de la Policía Estatal Preventiva (PEP) en oportuna atención impidieron que una ciudadana del poblado Ciudad Guadalupe Victoria fuera víctima de una extorsión en la modalidad de secuestro virtual.
Fue al filo de las 12:00 horas de ayer, cuando agentes de la corporación estatal atendieron un reporte ciudadano al número de denuncia anónima 089 en donde se detectó un posible intento de extorsión telefónica, ya que se describía el supuesto secuestro de una empleada de una farmacia y pedían a la propietaria 50 mil pesos a cambio de su libertad.
Los elementos al contar con la información del reporte se trasladaron al domicilio de la propietaria quien indicó que unas personas le llamaron por teléfono y se identificaron como supuestos integrantes de un grupo delictivo y la amenazaron con incendiar el negocio y asesinar a su empleada en caso de no depositar en un plazo de dos horas la cantidad requerida.
De inmediato los agentes se comunicaron a la casa de la empleada y los familiares explicaron que habían recibido una llamada telefónica amenazante indicando que tenían secuestrada a su hija y que no alertaran a las corporaciones de seguridad.
Los familiares indicaron que posteriormente intentaron establecer contacto vía telefónica con su hija pero no respondía a los llamados.
De inmediato los agentes desplegaron un operativo en los alrededores del negocio, donde no observaron actividades sospechosas e ilícitas pero al circular por la calle Tercera entre avenida Morelos y Matamoros se percataron de una persona que iba deambulando por la zona y que coincidía con las características físicas de la presunta persona secuestrada.
Los uniformados descendieron de la unidad y abordaron a la persona quien les manifestó que había recibido una llamada a su trabajo donde unas personas le pidieron que buscara una casa sola y que se mantuviera ahí, y que les proporcionara el número de su patrona y familiares, posteriormente ellos le darían indicaciones.
Los uniformados llevaron con sus familiares a la víctima y se comunicaron con la propietaria del negocio a quien le informaron que se trataba de una extorsión telefónica en la modalidad de secuestro virtual, por lo que les pidieron que mantuvieran la calma y no proporcionaran ninguna información personal ni financiera en caso de recibir más llamados de este tipo.
Posteriormente asesoraron a las personas involucradas sobre cómo proceder en caso de recibir este tipo de llamadas, destacando que la denuncia ciudadana fue clave para impedir el cometido de los extorsionadores.
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